El mundo del vino puede ser tan complejo como gratificante, lleno de sutilezas que pueden ser abrumadoras para los principiantes y a la vez emocionantes para los amantes del vino experimentados. Elegir un vino de calidad puede parecer una tarea desalentadora con tantas variedades, regiones y tipología de uvas para. Sin embargo, no hay motivo para sentirse intimidado. Con unos pocos consejos clave y un poco de conocimiento, podrás seleccionar un vino de calidad con confianza y disfrutar plenamente de la experiencia.
En este post, te guiaremos a través de los aspectos más importantes a tener en cuenta al elegir un vino, ayudándote a descubrir y apreciar el maravilloso mundo del vino. ¿Te apetece descubrir todos estos tips! ¡Pues sigue leyendo!
5 cosas en las que fijarte para elegir un vino de calidad
Cuando se trata de vinos, la calidad puede ser una noción subjetiva pues cada paladar es diferente. Sin embargo, existen ciertos indicadores que pueden ayudarte a seleccionar un vino de buena calidad. Entre ellos, te mostramos los cinco aspectos más importantes a considerar al elegir un vino:
1. Región vitivinícola
La región vitivinícola tiene un impacto significativo en la calidad del vino, ya que determina las condiciones específicas bajo las cuales las uvas crecen, lo que a su vez influye en las características y calidad del vino final.
De esta manera, el clima influye en la madurez de las uvas. Los climas cálidos tienden a producir uvas más dulces, mientras que los climas fríos pueden resultar en uvas con mayor acidez. Además, las variaciones climáticas año tras año pueden hacer que los vinos de la misma viña tengan perfiles de sabor distintos.
El suelo también juega un papel importante. Diferentes tipos de suelo aportan diferentes minerales a las uvas, afectando su sabor. Por ejemplo, los suelos calcáreos pueden aportar una mineralidad al vino, mientras que los suelos arcillosos pueden contribuir a vinos más ricos y corpulentos.
Por último, la geografía, incluyendo la altitud y la proximidad a cuerpos de agua, puede afectar la exposición al sol y la temperatura, lo que a su vez afecta el crecimiento de las uvas.
En este sentido, la DOCa Rioja, denominación de nuestros vinos Marqués del Atrio, presume de ser una de las denominaciones de origen con mayor reconocimiento y prestigio tanto en España como fuera de nuestras fronteras. En concreto, nuestra Bodega Marqués del Atrio está situada cerca de Mendavia, entre la Sierra de Codés y la vega del río Ebro, donde las viñas garantizan una suprema calidad de la uva.
2. Año de cosecha
El año de cosecha que figura en la etiqueta del vino se refiere al año en que se recolectaron las uvas. Las condiciones climáticas varían cada año y esto puede afectar la calidad de las uvas y, por ende, del vino. Algunos años son reconocidos por tener condiciones óptimas para la viticultura y los vinos de esos años suelen ser de mayor calidad. Por ejemplo, en la DOCa Rioja algunas de las añadas calificadas como EXCELENTES por el Consejo Regulador fueron las de los años 2001, 2004, 2005, 2010, 2011 y 2019.
Si quieres probar esta última añada, te aconsejamos degustar nuestro vino Marqués del Atrio 2 Cepas, un vino blanco elaborado a partir de Viura y Tempranillo Blanco (autóctona de Rioja), que se caracteriza por su buen volumen, retrogusto persistente y notas a fruta tropical madura.
3. Variedad de uva
La variedad de uva es uno de los factores más influyentes en la calidad y el perfil de sabor del vino. Cada variedad de uva tiene su propio conjunto de características, incluyendo diferentes niveles de dulzura, acidez, taninos y sabores.
Por ejemplo, la Cabernet Sauvignon, una variedad muy popular, produce vinos tintos ricos y robustos con altos niveles de taninos y sabores que pueden incluir grosella negra, menta y chocolate. Por otro lado, la Chardonnay, una de las principales uvas blancas, puede dar lugar a vinos desde ligeros y frescos con notas de manzana verde y limón, hasta ricos y mantequillosos con sabores a vainilla y melocotón, dependiendo de cómo se vinifique.
4. Proceso de elaboración
El proceso de elaboración del vino también está estrechamente relacionado con la calidad final del vino. Factores como el tiempo de fermentación, el tipo de barricas utilizadas para el envejecimiento y la duración del envejecimiento pueden tener un gran impacto en el sabor y la calidad del vino.
5. Puntuaciones y críticas
Las puntuaciones y críticas de expertos en vinos pueden ser una guía útil para determinar la calidad de un vino. Aunque estas puntuaciones son subjetivas, pueden dar una idea de la calidad general de un vino. Sin embargo, es importante recordar que el vino es una cuestión de gusto personal y lo que a una persona le parece un vino de alta calidad, a otra puede no parecerle así.
Cómo es un vino de buena calidad
Para determinar si un vino es de buena calidad, debes prestar atención a su equilibrio, profundidad, complejidad y persistencia. Un vino de buena calidad debería tener un equilibrio entre sus componentes (azúcar, acidez, taninos), una variedad de aromas y sabores (profundidad y complejidad) y un final prolongado (persistencia).
Un ejemplo de vino de buena calidad lo encontrarás en nuestro Marqués del Atrio Crianza. Se trata de un vino elaborado a partir de variedades Tempranillo y Graciano, de color rojo picota intenso y notas a ciruela, regaliz, pasa y recuerdos minerales.
En boca, destaca su lograda madurez, final persistente y armonioso y buen cuerpo. Puedes tomarlo como acompañamiento de platos de carnes rojas a la brasa, charcutería y quesos semicurados.
Recuerda que, al final del día, lo más importante es que disfrutes el vino. ¡Salud!
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